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Lanzamiento del libro Gestión colaborativa para el desarrollo y el fortalecimiento de las políticas públicas en materia de presupuesto local

El Fondo Editorial del ILAE acaba de lanzar bajo una licencia Creative Commons el libro electrónico Gestión colaborativa para el desarrollo y el fortalecimiento de las políticas públicas en materia de presupuesto local, 978-628-7532-29-8 de los docentes-investigadores Rubén García Huamani, Wilfredo Fernando Yupanqui Villanueva, Willian Pérez Sullcaray y Guido Amadeo Fierro Silva.

Cada día la participación ciudadana cobra fuerza en el mundo y en la sociedad contemporánea, esto se debe a mecanismos que, si bien han creado las mismas condiciones, de igual manera las comunidades lo han hecho así posible. Gracias a la participación los intereses que en su momento fueron individuales, ahora han tomado otro rumbo que ciertamente satisfacen a una comunidad en su conjunto. De allí que muchos problemas que se han presentado consigan una solución que no ponga en detrimento sus propios logros, proyectos e incluso aciertos como colectivo. A finales de la década de los 1960, fue evidente este rasgo que parecía estar definiendo un nuevo estilo de participación en los asuntos del presupuesto municipal para darle solución a problemas específicos, además, en la toma de decisiones y el empoderamiento. Sin embargo, tanto el empoderamiento como la toma de decisiones siguen siendo direccionados por otros entes quienes controlan las necesidades e intereses de las comunidades. En este sentido, Arnstein citada por Reyes y Ríos, señala que el problema latente es que las instancias de participación no sean más que formas de dar un barniz de legitimidad a decisiones tomadas con anterioridad. Así, esta clasificación implica que un proceso, para ser considerado verdaderamente participativo, debe generar un reequilibrio en el poder existente en la sociedad en que se implemente, haciendo que los marginados (“have not’s”) puedan realmente incidir en el proceso de toma de decisiones. Si bien la participación establece los mecanismos democráticos de cualquier sociedad, esta se define precisamente en las decisiones que se tomen. Esta no se define solo con la vaga y remota idea de decidir sobre algún asunto, sino de proponer mediante un diseño las políticas que pudieran de alguna u otra manera contribuir al desarrollo de la comunidad. En el marco constitucional peruano y ante el advenimiento de Gobiernos de facto, el principio de participación solo se restringía al ejercicio del sufragio, lo que generó como resultado que muchos se dieran a la tarea de crear mediante propuestas riesgosas que aminoraran las recientes experiencias nacidas en la colectividad, no precisamente decretadas por los Gobiernos de turno, a pesar de que estas ya se hallaban contenidas en los textos oficiales, lo que permitió que muchas de estas iniciativas se emplearan con fines políticos. Ya entrada la década de los 1990 y contenida en la Carta Magna, la participación fue ganando terreno hasta convertirse en uno de los principios medulares de la Constitución. En este sentido, la apuesta institucional fue precisamente la participación no solo como bandera electoral que fue empleada para ganar adeptos y hacerles frente a posturas que venían arrastrándose desde el pasado tal como ha señalado Remy. La apuesta institucional fue la participación ciudadana a través de mecanismos de democracia directa definidos en la nueva Constitución y desarrollados en la Ley de Derechos de Participación y Control Ciudadanos (Ley 26300), ambas promulgadas en 1993 y vigentes hoy. Así, se crean derechos como el de iniciativa legislativa, referendo y revocatoria de autoridades. Además, como desarrollo institucional de la participación ciudadana y probablemente por iniciativa de programas de cooperación técnica internacional o de agencias internacionales, se pusieron en práctica mecanismos micro locales de participación del tipo “poder del cliente” en el marco de la tercerización de algunos servicios. Desde esta perspectiva, la participación en los asuntos públicos no solo se ha concentrado en las decisiones que las mismas comunidades tomen como parte de su agenda, sino que la participación es un derecho consustanciado con el libre ejercicio de proponer, además de diseñar, lo que en esencia es la comunidad. Si bien la Constitución establece como centro medular la participación, esta no se define solo en el mencionado texto, sino que debe hacerse mediante la acción, lo que equivale a que la participación es, en la medida en que los pueblos logren la organización para decidir sobre sus propios asuntos, además de dirigir a través de los gobiernos locales, qué aspectos deben mejorar, así como diseñar propuestas que mejoren sus modos de vida valiéndose, claro está, de sus fortalezas como comunidad.

Un rasgo sobresale en la consecución del presente trabajo, el cual centra su atención tanto en la participación en los asuntos públicos para el diseño de propuestas que logren satisfacer las necesidades de la comunidad como los mecanismos de responsabilidad para el logro de objetivos en común. Si bien la investigación contempla una serie de concepciones que se han desprendido del diálogo con otras experiencias, también es importante resaltar que la misma es producto de un análisis con la finalidad de conocer la incidencia de los niveles de participación en los asuntos del presupuesto público, toma de decisiones, o empoderamiento, entre otros aspectos no menos importantes. La contribución de la presente investigación radica en que la búsqueda de nuevas soluciones a problemas de los sistemas administrativos como el SNIP, con respecto a que en la actualidad los municipios presentan desigualdades de condiciones para hacer frente a la presentación de estudio de pre inversión. Por tanto, las medidas deben apuntar a nivelar las competencias de aquellos gobiernos locales con más desventajas y de forma paralela mejorar al SNIP, que permitan reconocer las particularidades de los territorios; el mismo que servirá de base para esta investigación e investigaciones similares. El libro está estructurado en cinco capítulos:  los tres primeros forman parte de un corpus teórico, seguido de análisis y resultados y, el último, reflexiones en torno a la gestión y la participación, finalizando con un conjunto de referencias bibliográficas.

El libro se encuentra disponible para consulta y descarga gratuita en Publicaciones>Libros electrónicos.